“ Siempre tuve el anhelo de favorecer a los más necesitados; fui docente durante 44 años, lo cual me ha dado la experiencia para saber que invertir en la educación y en su formación integral, es lo único que realmente puede ayudar a un niño a cambiar su forma de pensar y su realidad.  Nadie nace siendo doctor… se hace. Por eso, estoy convencida que cada grano de arena que se aporte en el camino de la construcción será valioso para ver los sueños materializados… educar a un niño es educar a toda una generación”.      

Elizabeth Flórez, Padrino.

“Ingresé pequeña aproximadamente a los 7 años, realicé todo el proceso hasta los 19 años que salí de bachiller… estudié técnico en enfermería y luego administración de salud. Yo aproveché al máximo todas las ayudas por parte de mis padrinos y de la Fundación… gracias a ellos pude salir adelante con mi estudio y cumplir el sueño de servir a otros en el área de la salud”.

Ingrid Acero, Exbeneficaria.

“El que siembra, cosecha… tomé la decisión  de sembrar en la vida de un niño porque sé que no hay nada más gratificante que ayudar a construir mejores seres humanos… quiero participar de sus logros y verlos tener un mejor futuro”.

Blanca Niño, Padrino.

POR UNA NUEVA VIDA

Ellos son algunos de nuestros beneficiarios que esperan ser apadrinados para continuar con su proyecto en la Fundación. No lo pienses más y comienza a ser parte del mapa de vida de alguno de estos niños y adolescentes para construir juntos un futuro mejor.

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400 han sido beneficiarios de nuestro modelo desde 2001.

150 beneficiarios son apadrinados actualmente.

11 son los beneficiarios que aún no cuentan con un padrino que acompañe su proyecto.